Las Vallas de cristal son el mejor elemento para unir decoración con protección acústica. Su instalación es relativamente sencilla y aportan confort a las zonas donde deseemos delimitar y proteger el espacio.

Su aparente fragilidad por tratarse de material de vidrio, no es real ya que se instalan con acabados de producto laminado consistente en la unión de dos o más vidrios (láminas) a través de la utilización de un material plástico con excelentes cualidades de adherencia, elasticidad, transparencia y resistencia, que en caso de rotura los trozos de cristal no se caen, ni quedan esparcidos por el suelo, sino que continúan adheridos. Similar a las lunas de los vehículos.

Aparte de un excelente aislamiento acústico y de seguridad, su efecto estético es espectacular, combinándolas con perfilería de aluminio o acero inoxidable.